Fin del bloqueo

Fin del bloqueo

Jueves, 18 de Diciembre de 2008 00:39

* Los Presidentes de América Latina reunidos en Brasil demandan el final de la política estadounidense contra Cuba, en un gesto de unidad a un mes de asumir Barack Obama la Presidencia de Estados Unidos / Rotundo éxito diplomático de la Isla de la Dignidad frente a Washington COSTA DO SAUIPE, Brasil, 17 de diciembre (AFP).- Los presidentes de América Latina reunidos este miércoles en Costa do Sauipe, noreste de Brasil, pidieron el final del bloqueo estadounidense contra Cuba, en un gesto de unidad política, a un mes de asumir Barack Obama la Presidencia de Estados Unidos. “Pedimos al Gobierno de Estados Unidos que cumpla con lo dispuesto en 17 resoluciones sucesivas aprobadas en la Asamblea General de las Naciones Unidas y ponga fin al bloqueo económico, comercial y financiero que mantiene contra Cuba”, señalaron en una declaración especial emitida al final de la reunión. Los dirigentes solicitaron a Washington “que, con carácter inmediato, detenga la aplicación de las medidas adoptadas en el curso de los últimos cinco años” que limitan el envío de remesas y viajes de cubanoamericanos a la isla y fortalecieron el impacto de “su política de bloqueo”. La declaración retoma el término “bloqueo”, utilizado desde hace décadas por el Gobierno cubano para referirse al embargo económico establecido en 1962. La solicitud para levantar el bloqueo fue formulada a un mes de que llegue a la Casa Blanca el demócrata Barack Obama, quien planteó en su campaña la posibilidad de un acercamiento entre Estados Unidos y países a los que hasta el momento Washington considera enemigos. Obama, cuya asunción genera enormes expectativas en América Latina luego de ocho años de mandato de George W. Bush que han signado un distanciamiento con el país del Norte, ha señalado reiteradamente que el embargo no ha contribuido a democratizar Cuba. Y precisamente, el futuro ocupante de la Casa Blanca se mostró favorable a aliviar las disposiciones del año 2004 a las que se refieren los mandatarios en su declaración. La postura fue unánime y representa un fuerte espaldarazo político para Cuba, luego de haber sido integrado el martes al Grupo de Río, un mecanismo de consulta latinoamericano, sin órganos decisorios pero tradicional foro de debate en la región. Los matices fueron de todas maneras muy marcados en relación a la forma cómo América Latina debería plantear a Estados Unidos esta exigencia. El Presidente boliviano, Evo Morales, pidió darle un ultimátum colectivo a Obama para que levante el bloqueo, y en caso contrario, retirar a los embajadores estadounidenses del subcontinente. “Sería importante dar un término al nuevo gobierno de Estados Unidos para que levante el bloqueo económico. Si el nuevo gobierno de Estados Unidos no levanta el bloqueo económico, nosotros levantemos a sus embajadores”, dijo Morales, cuya propuesta fue secundada por su par ecuatoriano, Rafael Correa. Lula por su parte, fue mucho más cauto, y en rueda de prensa pidió darle una oportunidad a Obama de mostrar cuál será su política hacia América Latina. Hay que tener “prudencia y la diplomacia política para dar tiempo a que Obama tome posesión y comience a hacer política para que podamos aprobarla o reprobarla”, opinó. Los presidentes latinoamericanos y caribeños han presentado el encuentro de Sauipe como un momento histórico en busca de una mayor integración regional, y la cuestión cubana se convirtió en el tema por excelencia para alcanzar acuerdos colectivos que son más difíciles en otras áreas. Los presidentes dejarán Brasil además, con la idea encaminada de crear una organización a imagen de la Organización de Estados Americanos (OEA), pero sin la presencia de Estados Unidos y Canadá. “Ojalá podamos avanzar y formalizar la Organización de Estados Latinoamericanos y del Caribe”, expresó el mexicano Felipe Calderón. “Falta mucho por hacer” en materia de integración, “por ejemplo ya ir a una Organización de Estados Latinoamericanos”, expresó de su lado el ecuatoriano Correa. Para el venezolano Hugo Chávez, férreo crítico de Washington, “hay una nueva América Latina” en la que Estados Unidos “ya no manda”. Así, el Presidente de Cuba, Raúl Castro, logró en la Cumbre de América Latina en Brasil un éxito diplomático sin precedentes para la Isla: un asiento en el Grupo de Río y el reclamo al futuro Gobierno estadounidense de Barack Obama de cesar el bloqueo y dialogar. “Magnífico (...). Hago un balance muy bueno, me voy muy contento”, dijo Raúl Castro, al develar un busto del libertador sudamericano Simón Bolívar, en Salvador, noreste de Brasil. El cónclave de dos días, en Costa do Sauipe, Noreste de Brasil, concluyó con una declaración especial que pide a Washington poner fin al bloqueo de 46 años contra Cuba y con carácter inmediato las medidas que lo endurecieron en 2004, como las restricciones a los viajes y envío de remesas. “Resulta inaceptable la aplicación de medidas coercitivas unilaterales que afectan el bienestar de los pueblos y obstruyen los procesos de integración”, subrayó. Pero en Washington, el Secretario de Comercio de Estados Unidos, Carlos Gutierrez, afirmó que “el embargo ha tenido éxito” y aseguró que la política de Washington debe continuar con las medidas de presión hacia La Habana. “Nuestra política debería ser la misma mientras Fidel y Raúl sigan ahí (en el poder). Hasta que ese día no llegue, no debemos ser simplistas, ni ingenuos, sobre lo que está sucediendo ante nuestras orillas”, dijo. La elección de Obama abrió expectativas en la región de una distensión en el añejo conflicto entre Cuba y Estados Unidos, o al menos de un alivio al embargo. En Costa do Sauipe Raúl Castro, al mando de Cuba desde que enfermó su hermano Fidel, reiteró que está dispuesto a dialogar con Ojbama pero “en igualdad de condiciones”. La decisión fue saludada por los presidentes como una “reparación histórica” y destacada por Lula como una muestra del “cambio del perfil político e ideológico de América Latina”. “Fue un hecho histórico el ingreso de Cuba al Grupo de Rio, es un hecho de justicia incorporar a Cuba a un lugar donde nunca debió haber salido”, dijo la presidenta argentina, Cristina Kirchner. Paralelo a ello se escucharon críticas hacia la Organización de Estados Americanos (OEA), instancia que Cuba considera instrumento de Washington para agredirla. Saliendo al paso a las iniciativas de presidentes como Morales para que la OEA incluya a Cuba, Raúl Castro adelantó que su país no retornará al foro, “con o sin americanos”. Raúl Castro calificó de “magnífico” para la Isla el resultado de la Cumbre de América Latina y del Caribe en Brasil, que pidió el cese del “bloqueo” de Estados Unidos contra Cuba y sumó la isla al Grupo de Río. “Magnífico, he leído resúmenes en la prensa internacional y hacen un balance muy bueno de la cumbre. Y yo también, hago un balance muy bueno, me voy muy contento”, dijo Raúl Castro. El presidente cubano participó con sus colegas de Venezuela, Hugo Chávez, de Bolivia, Evo Morales, y de Honduras, Manuel Zelaya, en la develación de un busto al libertador sudamericano Simón Bolívar en la ciudad de Salvador de Bahí, nordeste de Brasil. “Creo que estos jefes de Estado y yo hemos tenido el privilegio de cerrar con broche de oro, inaugurando este busto de Bolívar, la cumbre que hemos celebrado durante estos últimos dos días en Sauipe”, dijo Raúl Castro en un breve discurso.