Inauguran II Congreso Mundial sobre este fenómeno
La titular del Poder Ejecutivo convocó a una alianza entre gobierno y ciudadanos en lo referente a temas ambientales, hídricos y de preservación de los recursos naturales, que permita planear las políticas necesarias para nuestra supervivencia En el ámbito mundial, México se ubica como una nación con baja posibilidad de agua a causa de su desperdicio, falta de pago, contaminación e inadecuada utilización, subrayó la presidenta de la Federación de Colegios de Ingenieros Civiles de la República Mexicana, María Elena Rosique Villanueva, durante la ceremonia de inauguración del II Congreso Mundial de Cambio Climático.Expuso que la problemática del agua no es exclusiva de nuestro país, porque en el mundo a diario se tiran dos millones de toneladas de desechos en lagos y ríos, con lo que la crisis del agua se acrecentará si no se toma esto como una emergencia planetaria.En presencia de la gobernadora Ivonne Ortega Pacheco y del director general de la Comisión Nacional del Agua, José Luis Luege Tamargo, describió un futuro sombrío en lo que se refiere al cambio climático porque disminuyen los glaciales y deshielos en la tundra, lo que provoca el gas metano. “Estudios de los científicos de la Nasa establecen que la tierra está alcanzando las temperaturas más altas de los últimos doce mil años; si se prolonga esta velocidad de desarrollo, la humanidad necesitará dos planetas para sostener el ritmo de vida”, advirtió. A su vez, la titular del Poder Ejecutivo convocó a una alianza entre gobierno y ciudadanos en lo referente a temas ambientales, hídricos y de preservación de los recursos naturales, que permita planear las políticas necesarias para nuestra supervivencia. Dijo que hoy más que nunca es urgente entender la relación estrecha entre la economía del desarrollo y el medio ambiente, “pues sólo con una examen profundo de ella empezaremos a valorar en toda su magnitud la amenaza contra la ecología”. En su conferencia, la gobernadora pidió transitar del paradigma económico que consideraba a los recursos naturales como infinitos a uno que se basa en el conocimiento de los límites del medio ambiente. “Los costos ambientales del despegue social y productivo, deben ser interiorizados, en vez de transferirlos a otras personas o a las futuras generaciones. Un gobierno consciente del desafío del desarrollo sustentable, del agua y el cambio climático, es el que marca el rumbo pensando e interiorización de todo los costos, específicamente los ambientales”, señaló. “En suma, la aportación del gobierno en estos temas siempre será la de crear la regulación y la nueva cultura cívica, que vincule las decisiones ambientales con las decisiones de política económica”, anotó. Este encuentro es convocado por la Federación de Colegios de Ingenieros Civiles de la República Mexicana (Fecic) y reúne desde ayer y hasta mañana a más de 400 expertos, investigadores y funcionarios relacionados con el tema del medio ambiente y el agua de todo el país, Puerto Rico y Estados Unidos. Por su parte, el titular de la Conagua reconoció que México atraviesa una problemática de baja disponibilidad de agua, pues en la década de los 50 existían 18 mil metros cúbicos por habitante al año y ahora sólo hay cuatro mil 400 metros cúbicos por persona para el mismo período. Aseguró que la baja disponibilidad del líquido por habitante es reflejo de la destrucción de los ecosistemas y cuencas hídricas, por lo que es necesario trabajar en la prevención de esta situación y contribuir a los esfuerzos mundiales para solucionar esta problemática ambiental. Al inaugurar el foro en representación del espurio Felipe Calderón Hinojosa, señaló que uno de los aspectos que más preocupan al Gobierno Federal en el tema del cambio climático es la vulnerabilidad de las ciudades. Expuso que se han establecido objetivos claros, plasmados en el Plan Nacional Hídrico 2007- 2012, para hacer frente a ese problema, tales como prevenir los riesgos derivados de fenómenos meteorológicos e hidrometeorológicos y evaluar los efectos del cambio climático en el ciclo hidrológico. Es necesario reforzar las acciones de predicción y seguimiento de fenómenos hidrometeorológicos extremos, de reubicación de asentamientos humanos en zonas de riesgo y de construcción de obras hidráulicas para proteger centros de población y áreas productivas, comentó. Para enfrentar con mayor éxito los efectos del cambio climático en el país, es necesario realizar más estudios con modelos a escala regional y profundizar en temas como la evapotranspiración potencial en nuestro país, el grado de vulnerabilidad y los posibles impactos de la intrusión salina en acuíferos, añadió. “Dentro de los planes, se prevé un análisis de los cambios de comportamiento en los eventos extremos, lo que permitirá generar mapas de riesgo asociados al incremento del nivel del mar, el cambio de régimen de lluvia y su impacto en la infraestructura hidráulica, además de que se identificarán las zonas inundables como consecuencia del incremento del nivel del mar, lo que permitirá promover las reubicaciones de asentamientos humanos y construir las obras de protección que correspondan”, indicó. El cambio climático es científicamente un fenómeno comprobado y es la mayor preocupación de la humanidad, por lo que “debemos estar adaptados y prevenir esta situación como país, como mexicanos y como personas”. Conagua dotará de nuevas tecnologías y equipos a sus especialistas para mejorar las tareas de apoyo a la población afectada por fenómenos meteorológicos, quienes actualmente suman 800, integrados en 13 Centros Regionales de Atención a Emergencias distribuidos estratégicamente en todo el país. En forma paralela se fortalecerá al Servicio Meteorológico Nacional, llevándolo al más alto nivel de tecnificación en el uso de herramientas modernas. Si bien las ciudades y poblaciones se han vuelto más vulnerables debido a los fenómenos hidrometeorológicos, no todo se le puede atribuir al cambio climático, pues el crecimiento poblacional, la falta de ordenamiento territorial y la deforestación de las cuencas también han jugado un papel importante. Por ello, la Conagua promueve acciones de reordenamiento territorial en las 12 regiones del país que registran mayores problemas de invasión y asentamientos en cauces y zonas federales. En el II Congreso Mundial de Cambio Climático, Rubén Compañ Fernández, presidente del Colegio de Ingenieros Civiles del Sureste, dijo que es necesario poner en operación más plantas de tratamiento, rehabilitar las que hay, invertir en infraestructura, tecnificación y riego para un mejor enfrentamiento del impacto del cambio climático, de una cultura de prevención y autoprotección, mecanismos reducir la vulnerabilidad y riesgos extremos. Demandó asimismo más y mejores programas de ordenamiento de territorio para que no haya en zonas de inundaciones. “Contribuyamos a prevenir y mitigar los efectos de los daños que hemos causado al medio ambiente, discutamos con argumentos, propuestas, soluciones, hagámoslo con seriedad y buena fe, con un entendimiento que sea provechoso, buscando en todo momento el interés general de todos, no de un grupo, sumando esfuerzos en beneficio del planeta”, expuso. Rosique Villanueva agregó que a mediados del siglo dos mil millones de personas padecerán escasez de agua en 48 países, eso depende de la explosión demográfica, pobreza, falta de políticas públicas. El total del agua es de mil 460 millones de kilómetros, de los cuales mil 360 en los madres y 29 millones nieves perpetuas, 65 millones en la humedad del suelo, 14 mil en el vapor y los ríos suman mil kilómetros de agua, es decir, el 0.0003% del agua del mundo. Si no se modifican las tendencias para el 2015 sólo habrá disponibles por persona 4,800 metros cúbicos, en la actualidad es de 6,800, y las causas son las sequías, pobreza, numerosas enfermedades asociadas a la mala calidad del agua. Al encuentro acuden representantes de la Planicie tabasqueña (Ríos Grijalva y Usumacinta; Cuenca Baja del Pánuco (Tamaulipas y Veracruz); Cuenca Baja del Río Bravo: Reynosa y Matamoros, Tamaulipas, Cuencas de la costa de Chiapas, Cuenca Media del Río Grijalva (Chiapas, aguas abajo de la presa Peñitas) y Cuenca Baja del Río Coatzacoalcos, Veracruz; además de la Cuenca Baja del Río Papaloapan y los Ríos Atoyac, Jamapa, Tecolutla, Nautla y Antigua en la misma entidad; Río Tulancingo, Hidalgo; Río Bravo, a la altura de Ciudad Juárez, Chihuahua; Los Cabos, Baja California Sur, y Acapulco, Guerrero. En la inauguración estuvieron Emilio Colón, presidente electo del Consejo Mundial de Ingenieros Civiles, los presidentes locales de la CMIC y la Canadevi, Víctor May Vera y Eduardo Ruiz Mendoza, así como el titular de la Japay, Roberto Pinzón Álvarez y el Secretario de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente, Eduardo Batllori Sampedro. (Rafael Gómez Chi) |