Camino del cambio

Feb 10 2009

Camino del cambio

Alfredo García
En torno a la noticia

El Presidente Barack Obama hizo ayer su primera convocatoria a trabajadores y clase media para solicitar apoyo a su Plan de Estímulo Económico, corregido y retrasado en el Congreso por la ultraderecha republicana y demócrata.
La pasada semana todos los actos públicos de Obama tuvieron como objeto promover el Plan, desde la concesión de entrevistas a los cinco principales canales de noticias televisadas de EU, hasta su visita a una escuela primaria.

La Cámara de Representantes aprobó el plan de estímulo de 819,000 millones de dólares, mientras que la versión en el Senado alcanzó 827,000 millones de dólares. El documento, criticado por la ultraderecha por considerar que dedica pocos fondos a los recortes de impuestos y demasiados a proyectos de inversión, necesita apoyo de al menos 60 de los cien senadores.
El fin de semana los demócratas, que tienen 58 escaños en el Senado, alcanzaron un acuerdo tentativo con tres republicanos para aprobar el proyecto de ley. Obama tiene como objetivo firmar la ley el 16 de febrero. Sin embargo, lograr un compromiso entre las dos versiones que difieren en cuanto a recortes de impuestos y gastos, puede dilatar su aprobación.
La localidad escogida por el presidente para hacer el llamado al apoyo popular fue la ciudad manufacturera de Elkhart, en el Estado de Indiana, donde la tasa de desempleo alcanzó el 15,3%, el doble de la media nacional.
Obama explicó las razones de su visita. “Prometí que regresaría si era elegido presidente, y haría todo lo que pudiera por ayudar a esta comunidad a recuperarse. Y por eso estoy aquí hoy, para decirles cómo intento mantener esa promesa”, afirmó el presidente. Posteriormente habló detalladamente a los residentes de Elkhart sobre el impacto que el plan de estímulo tendría en sus vidas, en términos de empleo, seguridad social, educación y salud.
Antes de terminar su presentación y responder preguntas del auditorio, Obama puso a prueba su condición de líder: “Hemos tenido un buen debate. Ahora es tiempo de actuar. Por eso estoy llamando al Congreso a aprobar inmediatamente la ley. La ayuda del pueblo de Elkhart y de toda América, se necesita ahora mismo. Ellos no pueden permitir mantenerse a la espera de que la gente de Washington lo haga”.
En la noche Obama ofreció en la Casa Blanca su primera conferencia de prensa como presidente, para dirigirse a la ciudadanía en otro esfuerzo por lograr el apoyo al plan de recuperación económica, cuya demora cuesta cada semana unos 150 mil puestos de trabajo.
A menos de un mes de asumir la presidencia, Obama se ve obligado a medir su visión política con la compleja realidad clasista de la sociedad norteamericana. Su idealismo y nobleza patriótica, al confiar en que la ultraderecha subordinaría sus intereses a los de la nación, resultó frustrada.
Junto a recomendaciones de sus asesores y alertas de líderes progresistas internacionales que desean éxito en su gestión, el mañoso proceso legislativo para aprobar el plan de estímulo económico impulsa a Obama a buscar el camino norteamericano del “cambio”.

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