Mar 27 2009 |
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Gilberto Balam Pereira
¿Por qué se presenta el cáncer de seno? La principal causa es el uso de ANTITRANSPIRANTES. Cuando vayan a casa “chequen” las etiquetas. Desodorantes, sí. ANTITRANSPIRANTES, NO. La concentración de toxina que éstos contienen causa el cambio de las células a cáncer. Los antitranspirantes inhiben a la axila para desalojar las toxinas de éstos y se depositan en los ganglios axilares. Los hombres no estamos exentos de desarrollar cáncer de “mama” porque tenemos en el tórax un tejido similar al del seno. Las mujeres que se aplican antitranspirantes enseguida después de afeitarse, incrementan el riesgo debido a pequeñas heridas en la piel que hacen que los químicos penetren más rápidamente en el cuerpo. Esta advertencia podría salvar muchas vidas.
Linaza. La semilla molida de linaza ha sido investigada por el Instituto para el Estudio de la Linaza de Canadá y EU. Concluyen que el rol principal de esta semilla es la prevención del cáncer de mama, próstata, colon, pulmón, etc. La semilla de linaza contiene 27 componentes anticancerígenos como la lignina. Es también excelente para bajar de peso, pues elimina el colesterol en forma rápida. Es mejor consumirla directamente y no en productos que se anuncian con contenido en linaza. Fraude. Tiene efecto tranquilizante y mejora las tensiones mentales de los ancianos. Por contener la semilla de linaza los aceites esenciales omega 3, 6, 9 ayuda a prevenir infecciones. El Dr. J.H. Vane, ganó el premio Nobel de Medicina en 1962 por descubrir el metabolismo de los aceites esenciales omega 3 y 6 en la prevención de problemas cardiacos. El consumo regular de linaza favorece el control de los niveles de azúcar en la sangre. Esta es una excelente noticia para los que usan insulina Modo de empleo: 2 cucharadas medianas de semillas pulverizadas se mezclan en un vaso de jugo de fruta o bien sobre la fruta, en el desayuno o en el almuerzo. La pueden tomar personas de todas las edades (niños, adolescentes y ancianos). Inclusive mujeres embarazadas.
Sopas Maruchan (E. Ríos, Rius). Son las más consumidas por la comodidad de tener una comida “completa” en cinco minutos. Todas son MALAS para la salud. Contienen chorros de aditivos, colorantes, saborizantes, mucha sal y un aditivo que es un verdadero veneno: el temido glutamato monosódico. Este lo encuentras en cubitos de caldo de pollo, salsas, frituras, cubos de jitomate y por supuesto en las odiosas sopas instantáneas. Desde los años 60s se popularizó un zazonador de marca Ajinomoto que se usaba como sal en todos los alimentos. Fue retirado del mercado al descubrirse que era altamente cancerígeno, pero se halla ahora en comida china o japonesa cuyos clientes empezaron a sufrir dolores de cabeza, irritación en los ojos, visión borrosa, taquicardia, sudoración excesiva, comezón generalizada, diarreas y asma por el efecto tóxico en las células nerviosas y que favorecía la obesidad y la esterilidad. Para los que usan Viagra, intenten primero con linaza ingerida. Por todo ello, guerra a las Maruchans y comidas orientales.
Coca-cola. En los primeros 10 minutos después de tomar esta chingadera, te habrás metido 10 cucharitas de azúcar en tu sistema digestivo (esto es, todo el azúcar recomendado para un día entero). A los 20 minutos tu hígado comienza a transformar todo el azúcar que encuentra, en grasa. De allí el sobrepeso. A los 40 minutos se completa la absorción de cafeína que contiene. Tus pupilas se dilatan. A los 45 minutos tu cuerpo aumenta la producción de dopamina, estimulando los centros de placer de tu cerebro. Así es como actúa la heroína (qué chévere). A los 60 minutos, el ácido fosfórico bloquea el calcio, zinc y magnesio en tu intestino grueso, acelerando tu metabolismo, lo que te obliga a “hacer del baño” y eliminas los minerales que tanto necesitas. El peor tóxico de este veneno es el conocido ácido fosfórico. Tan tan. Es mejor llegar a viejo, que no querer llegar a serlo, digo.
Por Esto!
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