Rosa Santana
CANCUN, Q. Roo, 1 de febrero (apro).- El alcalde de esta ciudad, Gregorio Sánchez Martínez, y el obispo de la Prelatura Cancún-Chetumal, Pedro Balo Elizondo Cárdenas, presentaron hoy el proyecto arquitectónico de lo que será la Catedral de Cancún que, pese al manifiesto rechazo popular, será construida en la reserva ecológica conocida como el “Ombligo Verde”, donde el edil planea edificar también un nuevo palacio municipal y el parque Bicentenario.
El controversial proyecto ha generado una serie de protestas ciudadanas y litigios promovidos por grupos ambientalistas para tratar de detenerlo.
Al respecto, Sánchez Martínez dijo hoy que se trata de un “minimovimiento que “tiene nombre y apellido” y acusó al PRI y PVEM de financiar las protestas.
Sobre el proyecto de la Catedral, Elizondo Cárdenas informó que las obras costarán entre 200 y 250 millones de pesos y demorarán de dos a tres años.
Señaló que éste fue el 12 proyecto que se les presentó, y dijo que el diseño arquitectónico es una fusión de la cultura maya y el catolicismo, que al mismo tiempo respetará la vegetación de la zona donde será construida, que es el último pulmón de la ciudad.
“Esta es la propuesta número 12. Hemos rechazado una tras otra porque no correspondían a lo que realmente nos interesaba como Catedral. Eran conceptos de concreto, minimalistas… Con este se conserva la naturaleza. Finalmente será un espacio para todos lo que requieran de paz y bienestar”.
Detalló que una parte de la Catedral, que tendrá capacidad para 1,800 personas, está inspirada en un edificio de la zona arqueológica de Chichén Itzá, conocido como el observatorio, y añadió que además habrá una pirámide en el pórtico de entrada, que será como la puerta maya de entrada al cielo.
Dijo que, hasta ahora, sólo se ha recaudado aproximadamente el 15% del monto total que se requiere para la obra, y señaló que parte de lo que falta se espera conseguir por medio de la venta de criptas.
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