“Meten tanto miedo y luego no nos atienden”

May 02 2009

“Meten tanto miedo y luego no nos atienden”

Por miedo o precaución, los capitalinos se examinan en la calle contra la influenza humana

MEXICO, D.F., 1 de mayo (AFP).- Una mujer indignada reclama porque el médico no examina a su hijo, con tos y malestar desde hace días, criticando que “meten tanto miedo y luego no nos atienden”, sentada frente a uno de los centros de salud ambulatorios montados en la capital mexicana debido a la gripe (influenza humana).
“¿Para qué nos asustan tanto, si ahora me dicen esto?”, se pregunta Patricia Salazar con ojos enrojecidos y voz golpeada, sin querer moverse del lado de una de las 115 “Caravanas de Salud” que el gobierno dispuso en Ciudad de México para detectar pacientes contagiados con el virus de la gripe, designada ahora oficialmente como gripe A (H1N1) por la Organización Mundial de la Salud.
“Me han dicho que sólo lo verá el médico cuando tenga fiebre, pero yo quiero que lo revise ahora, por precaución”, añade la mujer que, como gran parte de los 20 millones de habitantes de Ciudad de México, luce una mascarilla para protegerse del contagio de gripe, que ya dejó 16 muertos en el país y desató alarma mundial.
“¿Acaso tiene que estar muriéndose para que lo vea? Si lo llevo ahora a un hospital y está sano, capaz que ahí se contagie. Yo sólo quiero que lo examinen y me digan si tiene o no la gripe”, dice la mujer ante la AFP.
“Me duele la garganta, tengo tos y estornudos”, cuenta Ricardo, el hijo de 9 años de Patricia, que luce pálido y con ojos irritados. Con reticencia, Patricia decide llevar a su hijo al hospital.
La preocupación de esta mujer es compartida por la mayoría de las más de 200 personas que el jueves pasaron por este centro de atención -formado por enfermeras, dos médicos y encargados de información- instalado a un costado del monumental edificio del Museo de Bellas Artes, en el centro de la capital, donde se concentra la epidemia en México.
Al caer la tarde unas 30 personas - hombres y mujeres, ancianos, jóvenes y otros niños con sus madres - esperaban su turno aunque ya se había cumplido con creces el horario de atención.
El procedimiento es responder a un cuestionario donde además del nombre y la edad se indaga sobre la existencia de seis síntomas: temperatura por sobre 39 grados, tos, dolor de cabeza intenso, dolor de articulaciones, irritación de ojos y flujo nasal.
Si hay tres o más de estos síntomas presentes, los pacientes son derivados al médico.
“Estamos para prevenir y detectar casos de influenza”, explica a la AFP la enfermera Erandi Corona, mientras atiende persona tras persona.
“Si tiene más de tres síntomas lo revisa el médico, que evalúa si aplica o no una prueba de detección rápida de influenza. Si ése es el caso, le ordenará tratamiento, y si está muy grave lo enviará al hospital”, complementa Oscar Guillén, encargado de informaciones.
La prueba consiste en introducir un bastoncito con punta de algodón para extraer una muestra de mucosa nasal que luego se coloca en una sustancia reactiva para determinar qué tipo de gripe es, incluida la influenza humana o gripe A (H1N1).
Hasta ahora, la mayoría de la cincuentena de casos revisados por los médicos correspondían en esa unidad a gripe estacional o a infecciones respiratorias bacterianas y no se habían detectado casos de la temida gripe.
“Toda la gente viene con mucho temor, como todos. A veces sólo tienen flujo nasal, pero quieren revisarse igual”, añade Guillén.
“Me siento muy mal: estoy con fiebre y me duele todo el cuerpo desde hace unos días. Tengo miedo”, confiesa Ilse Córdova, de 19 años, que apenas habla mientras espera ser examinada.
“Me duele la garganta y tengo fiebre. Antes que avance, quiero saber qué tengo”, comenta de su lado Antonio Rodríguez, otro de los mexicanos que busca una certeza aunque da muestras de tranquilidad y asegura no tener miedo.
Un total de 17.367 personas fueron atendidas el jueves en las unidades móviles, entre las cuales se detectaron 121 con síntomas similares a los de la enfermedad y a 12 de ellas se las remitió a hospitales, según cifras oficiales.
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