Feb 03 2009 |
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* Felipe Calderón y Luis Téllez ocultaron a los mexicanos la existencia de un tercer tripulante en la cabina de mando minutos antes de que el avión se precipitara a tierra. Lo admitieron sólo después de que los POR ESTO! publicaron las evidencias
* La SCT miente al afirmar que esa tercera persona estuvo en la cabina una hora antes del accidente, cuando la grabación y la transcripción de la misma claramente señalan que fue 11 minutos antes del fatal desenlace
* Calderón y Téllez ocultan la verdad a los mexicanos al NO querer identificar quién era esa tercera persona que ingresó a la cabina de mando
* El espurio y su Secretario de Comunicaciones y Transportes mienten al afirmar que no pueden divulgar las grabaciones totales del accidente escudándose en un convenio suscrito con la OACI, el cual SI lo permite bajo determinadas circunstancias
* Calderón y Téllez ofenden y se burlan de la memoria de experimentados pilotos atribuyéndoles la responsabilidad del trágico accidente, cuando la hipótesis más sólida apunta hacia el entonces ilegítimo secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño Tarrazo, cuya voz correspondería a la advertencia de: “ora sí ya vine a manejar”.
* Irresponsabilidad e incompetencia se conjugan con la vileza y la perversidad, ocultas tras la mentira y el desprecio hacia la Opinión Pública, en la conducta del espurio Felipe Calderón Hinojosa y su estrecho círculo de cómplices. A éstos lo único que les preocupa son sus intereses, que incluyen los más afines a sus sentimientos. La muerte de un cuadro de dirección en materia de Seguridad del Estado, como lo fue José Luis Santiago Vasconcelos, y las de otras siete personas que viajaban con Mouriño Tarrazo, así como la trágica suerte de siete ciudadanos que perdieron la vida al estrellarse el Lear Jet en la Ciudad de México; estos decesos lamentables, se repite y se insiste, tienen muy sin cuidado a Calderón y a Téllez
* Correr el velo para conocer la Verdad aterroriza al espurio y a su operador en la Secretaría de Comunicaciones y Transportes. Confirmaría que el timón de la nave mexicana está en manos de la irresponsabilidad y la ineptitud
* POR ESTO! cumple con el deber del Periodismo Auténtico, que no sólo es ir en la búsqueda de la Verdad, sino también en publicarla, por respeto a sus amables lectores, a la Opinión Pública. De esto NO quepa la menor duda. Así es.
Mañana se cumplen tres meses de la muerte de Juan Camilo Mouriño Tarrazo, Secretario de Gobernación ilegítimo, y durante todo este lapso el gobierno espurio ha mentido y ocultado la verdad a los mexicanos sobre la información generada hasta ahora sobre ese accidente aéreo…
En sus dizque esfuerzos de “máxima transparencia” sobre el caso, Felipe Calderón y el titular de la SCT, Luis Téllez, ocultaron desde un principio que había una tercera persona en la cabina del Lear Jet minutos antes de que se desplomara a tierra y no fue sino hasta el pasado 26 de enero que POR ESTO! publicó la hipótesis de que esa tercera persona era Juan Camilo Mouriño, que la SCT lo admitió públicamente.
Sin embargo, Fernando Carbonell Paredes, vocero de esa dependencia federal, miente cuando señala que esa tercera persona sólo estuvo en la cabina de pilotos “una hora” antes del accidente, pues tanto en la grabación como en el documento notarizado de la propia SCT, claramente se escucha cuando una de las azafatas pregunta a los pilotos cuánto falta para aterrizar y le contestan que once minutos; inmediatamente después se oye la voz del mencionado tercer sujeto que advierte que ha venido a tripular el avión.
CAM: Voz femenina. Disculpe ¿como en cuánto tiempo llegamos?
HOT 1.-Once minutos.
HOT 2.-En once minutos.
CAM: Voz masculina: Ora sí ya vine a manejar.
Por cierto, la “máxima transparencia” de la que se vanaglorian FeCal y Téllez no explica por qué en el documento notarizado por la propia SCT se borró el cómputo del tiempo correspondiente a gran parte de las grabaciones, como sí aparece en los momentos previos al desenlace fatal.
Asimismo, en el reporte de investigación elaborado por expertos de la National Transportation Safety Board de los EE.UU., claramente se precisa que el canal número 1, de los cuatro con que contaba la grabadora del avión, extrañamente carecía de contenido alguno. ¿Dónde está ese contenido y por qué no le fue proporcionado al equipo investigador?
El vocero de Téllez dice que no pueden dar a conocer las grabaciones originales porque nuestro país firmó un convenio con la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI, por sus siglas en inglés), pero también aquí el funcionario miente de nuevo, pues el citado convenio, en el apartado 5.12 del Anexo 13 suscrito por México, claramente indica que SI es posible hacerlo, siempre que la revelación del contenido de las grabaciones pueda contribuir a evitar un accidente futuro.
En este caso, resulta claro que la presencia de una tercera persona en la cabina de mando constituyó una peligrosa distracción en momentos clave de la travesía, pues estaba próximo el aterrizaje en medio de un denso tráfico aéreo, que la propia SCT ilustró con imágenes de sus radares horas después del accidente. Esta desconcentración se evidencia claramente cuando los que estaban al mando tuvieron problemas para corroborar la instrucción relacionada con la orden de aceleración desde el servicio de radar.
Tanto el espurio como su secretario de Comunicaciones y Transportes recurrieron a medios de comunicación a su servicio para calificar a los POR ESTO! de “perversos” por señalar la hipótesis de que Juan Camilo Mouriño era la tercera persona en la cabina y responsable de “pilotear” el Lear Jet, cuyo viaje concluyó en una tragedia.
Sin embargo, la perversidad y la irresponsabilidad se ubican precisamente en Los Pinos y en la SCT, desde donde se niegan a identificar plenamente a la tercera persona en la cabina del Lear Jet, de cuya existencia NADIE sabía hasta que fue revelada por los POR ESTO!
Los Diarios de la Dignidad, la Identidad y la Soberanía han cumplido con el deber de dar a conocer lo que el espurio y la SCT habían tratado de ocultar: que hubo una tercera persona en la cabina de mando del avión y que esa persona no era otra que Juan Camilo Mouriño Tarrazo, acostumbrado, de acuerdo con los miembros de su círculo íntimo, a hacer ostentación de su “capacidad” para “pilotear” los aviones en los que viajaba, sin importarle en lo más mínimo las estrictas medidas de seguridad y la responsabilidad de su ilegítimo cargo político.
Los POR ESTO! desafían al espurio y a su operador en la SCT a que difundan, sin edición de ninguna especie, las grabaciones totales registradas en el Lear Jet en el que viajaban Juan Camilo Mouriño, José Luis Santiago Vasconcelos y los otros siete pasajeros, a fin de que los mexicanos TODOS se enteren de la VERDAD COMPLETA sobre el trágico accidente.
La Dirección General de los POR ESTO! también recomienda gárgaras con creolina al espurio y a Luis Téllez antes de referirse al Diario de la Dignidad, la Identidad y la Soberanía.
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