Jan 08 2009 |
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La propuesta de López Obrador
Ningún gobierno puede mantenerse sólido mucho tiempo sin una oposición temible
Benjamin Disraeli
Por Francisco Rodríguez
“La oposición gobierna oponiéndose”, solía decir don Jesús Reyes Heroles -el original- y, muy parcialmente, así ha sucedido ahora que el ocupante de Los Pinos apenas ha anunciado un Acuerdo Nacional en Favor de la Economía Familiar y el Empleo, con el que se pretende hacer frente a los estragos que aquí provoca la crisis financiera mundial.
Muy parcialmente, sí, porque desde la primera mitad de diciembre anterior, el principal opositor de la actual Administración, el señor Andrés Manuel López Obrador, presentó en una carta al Pueblo de México, firmada en Bolaños, Jalisco, un plan de ocho puntos mucho más ambicioso y completo.
Primero de esos puntos, no satisfecho por el señor Felipe Calderón, es el de aumentar cuando menos en un 12 por ciento el salario mínimo y, en consecuencia, los contractuales, para mínimamente “reponer el porcentaje en el que la inflación de 2006 a 2008 excedió al aumento de los mínimos y otorgar suficiente aumento para compensar la inflación de 2009”.
Y es que, señala el Plan de AMLO, según cifras oficiales -invariablemente maquilladas-, la inflación en los dos últimos años (noviembre del 2006 a noviembre del 2008) ha sido de 12.9% en la canasta básica. En cambio, el salario mínimo ha aumentado sólo 8%; es decir ha perdido 4 puntos.
Segundo punto: derogar el IETU como apoyo a trabajadores asalariados, comercios y empresas, debido principalmente a sus aberraciones técnicas como -ejemplifica- lo es “el hecho de que el pago de intereses de la deuda de las empresas no es deducible ni tampoco las pérdidas cambiarias, precisamente cuando todas las empresas de México están golpeadas por ambos problemas”.
El descenso en el precio de los combustibles y no el congelamiento del mismo, como lo anunció el señor Calderón, es el tercer punto del Plan de AMLO. “Es injustificable que las gasolinas en México sean más caras que en Estados Unidos y que los aumentos de energía eléctrica para consumo doméstico hayan incrementado este año hasta el 100 por ciento”. Peor todavía. En el anuncio hecho ayer por el ocupante de Los Pinos, las tarifas de energía eléctrica para uso doméstico ni siquiera están contempladas. Esto es, implícitamente se advierte que seguirán subiendo.
Cuarto punto del plan presentado en tierras jaliscienses es el de la intervención gubernamental en los fondos de retiro de los trabajadores, para evitar mayores pérdidas o minusvalías en los mismos. Ello después de conocerse que, hasta octubre de 2008, las Afores habían reducido en 14% su valor.
Los puntos 5, 6 y 7 apuntan a la necesidad de impulsar al sector agropecuario para producir en México lo que consumimos, fortalecer la industria de la construcción para reactivar la economía y generar empleos, y extender los apoyos al desarrollo social.
Parcialmente satisfechas las demandas del opositor, demasiado parcialmente quizá, el octavo punto del Plan jamás será cumplido. Y es que éste propone reducir en 200 mil millones el gasto corriente del gobierno, en salarios de los funcionarios, para ahorrar y destinar fondos a la atención de la crisis económica y de bienestar social.
Cierto. “La oposición gobierna oponiéndose”.
www.indicepolitico.com
pacorodriguez@journalist.com
Por Esto!
Benjamin Disraeli
Por Francisco Rodríguez
“La oposición gobierna oponiéndose”, solía decir don Jesús Reyes Heroles -el original- y, muy parcialmente, así ha sucedido ahora que el ocupante de Los Pinos apenas ha anunciado un Acuerdo Nacional en Favor de la Economía Familiar y el Empleo, con el que se pretende hacer frente a los estragos que aquí provoca la crisis financiera mundial.
Muy parcialmente, sí, porque desde la primera mitad de diciembre anterior, el principal opositor de la actual Administración, el señor Andrés Manuel López Obrador, presentó en una carta al Pueblo de México, firmada en Bolaños, Jalisco, un plan de ocho puntos mucho más ambicioso y completo.
Primero de esos puntos, no satisfecho por el señor Felipe Calderón, es el de aumentar cuando menos en un 12 por ciento el salario mínimo y, en consecuencia, los contractuales, para mínimamente “reponer el porcentaje en el que la inflación de 2006 a 2008 excedió al aumento de los mínimos y otorgar suficiente aumento para compensar la inflación de 2009”.
Y es que, señala el Plan de AMLO, según cifras oficiales -invariablemente maquilladas-, la inflación en los dos últimos años (noviembre del 2006 a noviembre del 2008) ha sido de 12.9% en la canasta básica. En cambio, el salario mínimo ha aumentado sólo 8%; es decir ha perdido 4 puntos.
Segundo punto: derogar el IETU como apoyo a trabajadores asalariados, comercios y empresas, debido principalmente a sus aberraciones técnicas como -ejemplifica- lo es “el hecho de que el pago de intereses de la deuda de las empresas no es deducible ni tampoco las pérdidas cambiarias, precisamente cuando todas las empresas de México están golpeadas por ambos problemas”.
El descenso en el precio de los combustibles y no el congelamiento del mismo, como lo anunció el señor Calderón, es el tercer punto del Plan de AMLO. “Es injustificable que las gasolinas en México sean más caras que en Estados Unidos y que los aumentos de energía eléctrica para consumo doméstico hayan incrementado este año hasta el 100 por ciento”. Peor todavía. En el anuncio hecho ayer por el ocupante de Los Pinos, las tarifas de energía eléctrica para uso doméstico ni siquiera están contempladas. Esto es, implícitamente se advierte que seguirán subiendo.
Cuarto punto del plan presentado en tierras jaliscienses es el de la intervención gubernamental en los fondos de retiro de los trabajadores, para evitar mayores pérdidas o minusvalías en los mismos. Ello después de conocerse que, hasta octubre de 2008, las Afores habían reducido en 14% su valor.
Los puntos 5, 6 y 7 apuntan a la necesidad de impulsar al sector agropecuario para producir en México lo que consumimos, fortalecer la industria de la construcción para reactivar la economía y generar empleos, y extender los apoyos al desarrollo social.
Parcialmente satisfechas las demandas del opositor, demasiado parcialmente quizá, el octavo punto del Plan jamás será cumplido. Y es que éste propone reducir en 200 mil millones el gasto corriente del gobierno, en salarios de los funcionarios, para ahorrar y destinar fondos a la atención de la crisis económica y de bienestar social.
Cierto. “La oposición gobierna oponiéndose”.
www.indicepolitico.com
pacorodriguez@journalist.com
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