Jan 12 2009 |
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* En materia de desempleo de las últimas dos décadas, advierte la Confederación de Cámaras Industriales (CONCAMIN) / Será muy complicado para la operación y la sobrevivencia de buena parte de la planta industrial / Cerraron más de 400 mil fuentes de trabajo en los últimos 2 meses del 2008
MEXICO, D.F., 11 de enero (LA JORNADA).- En el 2009 será el peor año en materia de desempleo de las últimas dos décadas advirtió la Confederación de Cámaras Industriales (CONCAMIN), toda vez que tan sólo se crearían 75 mil plazas formales en el año.
Señaló que desde octubre pasado la industria comenzó su tránsito por la recesión más severa de su historia reciente y este año será muy complicado para la operación y la sobrevivencia de buena parte de la planta industrial.
A su vez, el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) reconoció que las expectativas del sector laboral no son alentadoras y recordó que en 2008 la pérdida neta de empleos fue de 37 mil 500 trabajadores, de acuerdo con datos del Seguro Social.
Por su parte, Patricia Rodríguez, del Instituto de Investigaciones Económicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), vaticinó que el problema fundamental en el 2009 y el 2010 serán los elevados niveles de desempleo, por lo que el gobierno debe plantear un programa suficientemente sólido para encarar la falta de fuentes de trabajo, que incluya elementos para ayudar al salario real y sobre todo subsidios a los sectores más bajos de la población.
En un mes el sector privado bajó a la mitad su estimación de crecimiento en materia laboral, toda vez que en diciembre pasado organismos como la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación preveían que para este año se generarían unas 150 mil fuentes de empleo en la economía formal, del millón 200 mil puestos que se requieren anualmente. Días después el CEESP estimó una posible creación de 81 mil empleos, cifra que puso en duda, tras reconocer que las perspectivas sobre el sector laboral podrían echar por tierra ese pronóstico, sobre todo porque la estimación de crecimiento del producto interno bruto es negativa.
En su publicación Pulso Industrial de este mes, la CONCAMIN advierte que si en el 2008 la economía mexicana perdió su dinamismo, “en el 2009 se dirige irremediablemente hacia una profunda y larga recesión” y parte de las consecuencias serán la pérdida en la producción y cierre de fuentes de trabajo.
El organismo empresarial señala que la industria es el componente donde se concentra el mayor debilitamiento de la actividad económica que desde octubre hiló su sexto retroceso el año pasado y acumuló dos trimestres consecutivos con números negativos, “es posible afirmar que el sector industrial mexicano ha iniciado su tránsito por lo que será la más profunda recesión en las últimas décadas.
“En el 2009 se frenará la inversión, lo mismo que la generación de fuentes de empleo en el sector formal, hasta colocarla en su nivel más bajo de los últimos años. Estimamos un aumento de tan sólo 75 mil empleos en 2009”, indicó la CONCAMIN.
La recesión fabril se observa, dijo, en los paros técnicos, ajustes de personal, reducción de turnos, disminución de jornadas, programas de ajuste administrativo y las estrategias para recortar costos, mientras que la reducción de la demanda del principal mercado externo, el estadunidense, el deterioro de las expectativas de empresarios y consumidores y el aumento del desempleo, entre otros factores, provocarán la caída de 2.9 por ciento en la producción fabril y un retroceso de 3.6 por ciento en la actividad del más importante componente, la manufactura, que registrará números rojos por segundo año consecutivo.
Por su parte, la investigadora de la UNAM, Patricia Rodríguez, afirmó que durante el 2009 y el 2010 el problema fundamental serán los elevados niveles de desempleo, por lo que resulta necesario que el gobierno plantee programas suficientemente sólidos para encarar la falta de fuentes de trabajo.
La estrategia, apuntó, debe incluir elementos para ayudar al salario real. “Con el programa (anticrisis) se quiere encarar el problema del desempleo, pero faltan elementos para resguardar el mercado laboral en México que de por sí está deteriorado. Se debe pensar en la idea de subsidios a los sectores más bajos de la población”.
Asimismo, en los dos últimos meses de 2008 fueron cerradas más de 400 mil fuentes de trabajo, entre permanentes y eventuales, el peor desplome del empleo formal en zonas urbanas en los últimos tres gobiernos, revelan cifras oficiales.
De octubre pasado al cierre de diciembre, el número de trabajadores afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) pasó de 14 millones 564 mil 569 personas empleadas en el sector formal de la economía, a 14 millones 178 mil 117. Sin embargo se debe tomar en cuenta que históricamente es en enero de cada año cuando se refleja con mayor crudeza la caída en el empleo.
Las cifras más recientes sobre el número de trabajadores en el sector formal de la economía fueron remitidas por el IMSS a la Secretaría del Trabajo y ésta dependencia, a su vez, las envió al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) para la elaboración de los Indicadores de Ocupación y Empleo que este organismo emite mensualmente.
Las cifras sobre el número de trabajadores asegurados en el IMSS reflejan el impacto que tuvo la crisis económica en el empleo, misma que en México se manifestó con claridad a partir de la devaluación del peso registrada al inicio de octubre.
Por Esto!
MEXICO, D.F., 11 de enero (LA JORNADA).- En el 2009 será el peor año en materia de desempleo de las últimas dos décadas advirtió la Confederación de Cámaras Industriales (CONCAMIN), toda vez que tan sólo se crearían 75 mil plazas formales en el año.
Señaló que desde octubre pasado la industria comenzó su tránsito por la recesión más severa de su historia reciente y este año será muy complicado para la operación y la sobrevivencia de buena parte de la planta industrial.
A su vez, el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) reconoció que las expectativas del sector laboral no son alentadoras y recordó que en 2008 la pérdida neta de empleos fue de 37 mil 500 trabajadores, de acuerdo con datos del Seguro Social.
Por su parte, Patricia Rodríguez, del Instituto de Investigaciones Económicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), vaticinó que el problema fundamental en el 2009 y el 2010 serán los elevados niveles de desempleo, por lo que el gobierno debe plantear un programa suficientemente sólido para encarar la falta de fuentes de trabajo, que incluya elementos para ayudar al salario real y sobre todo subsidios a los sectores más bajos de la población.
En un mes el sector privado bajó a la mitad su estimación de crecimiento en materia laboral, toda vez que en diciembre pasado organismos como la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación preveían que para este año se generarían unas 150 mil fuentes de empleo en la economía formal, del millón 200 mil puestos que se requieren anualmente. Días después el CEESP estimó una posible creación de 81 mil empleos, cifra que puso en duda, tras reconocer que las perspectivas sobre el sector laboral podrían echar por tierra ese pronóstico, sobre todo porque la estimación de crecimiento del producto interno bruto es negativa.
En su publicación Pulso Industrial de este mes, la CONCAMIN advierte que si en el 2008 la economía mexicana perdió su dinamismo, “en el 2009 se dirige irremediablemente hacia una profunda y larga recesión” y parte de las consecuencias serán la pérdida en la producción y cierre de fuentes de trabajo.
El organismo empresarial señala que la industria es el componente donde se concentra el mayor debilitamiento de la actividad económica que desde octubre hiló su sexto retroceso el año pasado y acumuló dos trimestres consecutivos con números negativos, “es posible afirmar que el sector industrial mexicano ha iniciado su tránsito por lo que será la más profunda recesión en las últimas décadas.
“En el 2009 se frenará la inversión, lo mismo que la generación de fuentes de empleo en el sector formal, hasta colocarla en su nivel más bajo de los últimos años. Estimamos un aumento de tan sólo 75 mil empleos en 2009”, indicó la CONCAMIN.
La recesión fabril se observa, dijo, en los paros técnicos, ajustes de personal, reducción de turnos, disminución de jornadas, programas de ajuste administrativo y las estrategias para recortar costos, mientras que la reducción de la demanda del principal mercado externo, el estadunidense, el deterioro de las expectativas de empresarios y consumidores y el aumento del desempleo, entre otros factores, provocarán la caída de 2.9 por ciento en la producción fabril y un retroceso de 3.6 por ciento en la actividad del más importante componente, la manufactura, que registrará números rojos por segundo año consecutivo.
Por su parte, la investigadora de la UNAM, Patricia Rodríguez, afirmó que durante el 2009 y el 2010 el problema fundamental serán los elevados niveles de desempleo, por lo que resulta necesario que el gobierno plantee programas suficientemente sólidos para encarar la falta de fuentes de trabajo.
La estrategia, apuntó, debe incluir elementos para ayudar al salario real. “Con el programa (anticrisis) se quiere encarar el problema del desempleo, pero faltan elementos para resguardar el mercado laboral en México que de por sí está deteriorado. Se debe pensar en la idea de subsidios a los sectores más bajos de la población”.
Asimismo, en los dos últimos meses de 2008 fueron cerradas más de 400 mil fuentes de trabajo, entre permanentes y eventuales, el peor desplome del empleo formal en zonas urbanas en los últimos tres gobiernos, revelan cifras oficiales.
De octubre pasado al cierre de diciembre, el número de trabajadores afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) pasó de 14 millones 564 mil 569 personas empleadas en el sector formal de la economía, a 14 millones 178 mil 117. Sin embargo se debe tomar en cuenta que históricamente es en enero de cada año cuando se refleja con mayor crudeza la caída en el empleo.
Las cifras más recientes sobre el número de trabajadores en el sector formal de la economía fueron remitidas por el IMSS a la Secretaría del Trabajo y ésta dependencia, a su vez, las envió al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) para la elaboración de los Indicadores de Ocupación y Empleo que este organismo emite mensualmente.
Las cifras sobre el número de trabajadores asegurados en el IMSS reflejan el impacto que tuvo la crisis económica en el empleo, misma que en México se manifestó con claridad a partir de la devaluación del peso registrada al inicio de octubre.
Por Esto!
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